El té es una de las bebidas más consumidas en el mundo, y no solo por su sabor y variedad, sino también por sus propiedades saludables. Entre ellas, destaca su capacidad para ayudar a bajar de peso, gracias a sus efectos diuréticos, antioxidantes y termogénicos.
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El té es una bebida saludable y deliciosa, que puede ayudarte a bajar de peso de forma natural y segura. Sin embargo, no se trata de un producto milagroso, sino de un complemento que debe ir acompañado de una alimentación sana y un estilo de vida activo. Así, podrás disfrutar de los beneficios del té para tu salud y tu figura.
Efectos beneficiosos del Té
Diurético
El té tiene un efecto diurético, es decir, que favorece la eliminación de líquidos y toxinas del organismo a través de la orina. Esto ayuda a prevenir la retención de líquidos, que puede causar hinchazón, pesadez y aumento de peso. Además, al eliminar las sustancias de desecho, el té mejora el funcionamiento del hígado y los riñones, órganos encargados de depurar el organismo.
Antioxidante
El té es rico en polifenoles, unos compuestos con una gran capacidad antioxidante, que protegen a las células del daño causado por los radicales libres. Estos son moléculas inestables que se generan por el estrés, la contaminación, el tabaco, la mala alimentación y otros factores, y que pueden provocar inflamación, envejecimiento y enfermedades. Al combatir los radicales libres, el té reduce la inflamación y mejora el metabolismo, lo que facilita la quema de grasas.
Termogénico
El té tiene un efecto termogénico, es decir, que aumenta la temperatura corporal y el gasto energético. Esto se debe a que el té contiene cafeína y catequinas, unos compuestos que estimulan el sistema nervioso y el sistema cardiovascular, respectivamente. Al hacerlo, el té acelera el ritmo cardíaco, la respiración y la actividad muscular, lo que hace que el cuerpo queme más calorías. Además, el té inhibe la absorción de grasas y azúcares en el intestino, lo que evita que se acumulen en el tejido adiposo.
¿Qué tipo de té elegir?
Existen muchos tipos de té, cada uno con sus propias características y beneficios. Sin embargo, algunos de los más recomendados para bajar de peso son:
- Té verde: es el más conocido y consumido, y también el que tiene más evidencia científica sobre sus efectos adelgazantes. Contiene una alta concentración de catequinas, especialmente de EGCG (epigalocatequina galato), que potencia el efecto termogénico y antioxidante del té. Además, el té verde tiene un sabor suave y refrescante, que se puede combinar con limón, menta, jengibre o miel.
- Té rojo: también llamado pu-erh, es un té fermentado que tiene un sabor intenso y terroso. Su principal ventaja es que mejora la digestión y la eliminación de grasas, ya que contiene unas bacterias beneficiosas que actúan sobre el intestino. Además, el té rojo reduce el colesterol, la presión arterial y el azúcar en sangre, lo que previene el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes.
- Té Negro: contiene antioxidantes y otras sustancias que podrían ayudar a proteger el corazón y los vasos sanguíneos. Está hecho con hojas y tallos envejecidos de la planta de Camellia sinensi, es efectivo para mantener el estado mental en alerta.
- Té blanco: es el más delicado y exclusivo, ya que se elabora con los brotes más jóvenes y tiernos de la planta del té. Tiene un sabor suave y dulce, y una alta concentración de polifenoles, que le confieren un gran poder antioxidante. El té blanco también tiene un efecto diurético y termogénico, aunque menor que el té verde o el té rojo, debido a que contiene menos cafeína y catequinas.
¿Cómo tomar el té para bajar de peso?
Para aprovechar al máximo los beneficios del té para bajar de peso, se recomienda seguir estas pautas:
- Tomar entre 3 y 5 tazas de té al día, preferiblemente entre las comidas y con el estómago vacío, para evitar interferir con la absorción de hierro y otros nutrientes.
- Preparar el té con agua caliente, pero no hirviendo, para preservar sus propiedades. El tiempo de infusión varía según el tipo de té y es muy importante respetar esos tiempos para conseguir el autentico sabor de cada té.
- No añadir azúcar, leche ni otros edulcorantes al té, ya que pueden reducir su efecto adelgazante y aumentar el aporte calórico. Si se desea, se puede endulzar el té con stevia, un edulcorante natural que no aporta calorías ni afecta al metabolismo.
- Combinar el consumo de té con una dieta equilibrada y variada, rica en frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos, pescado y carnes magras. Evitar el exceso de grasas, azúcares, sal y alimentos procesados, que favorecen el aumento de peso y la inflamación.
- En la medida que se pueda practicar ejercicio físico de forma regular, al menos 3 veces por semana, durante 30 minutos o más. El ejercicio ayuda a quemar calorías, tonificar los músculos, mejorar la circulación y el ánimo, y potenciar los efectos del té.
¿A qué esperas para probarlo? 🍵